Los Detectives Privados, fruto de la situación de emergencia sanitaria mundial, se han adaptado atendiendo a la situación derivada del COVID-19, pensando sobre todo en la tranquilidad de los clientes, estableciendo un protocolo de seguridad para la contratación de los servicios sin que el cliente tenga que moverse de su domicilio. El proceso de investigación (visita, presupuesto, contratación, recogida de datos, comunicación de resultados y entrega del informe) la pueden realizar íntegramente online.
Las correspondientes adaptaciones son las siguentes:
Empresa
- Teletrabajo: Desde el inicio del confinamiento son muchas las empresas que tras la implementación obligada del teletrabajo, mantienen empleados bajo dicha modalidad. Tal situación ha generado una falta de control empresarial sobre la verdadera dedicación del empleado durante su horario laboral, por cuanto existen multitud de aplicaciones que permiten simular la actividad frente al ordenador (generador de clics, de tecleado…), así como actividades que no requieren de una actividad continuada de equipos ofimáticos online (actividades comerciales, de prospección y control…), de tal forma que el trabajador pueda dedicarse a otros fines sin que la empresa llegue a tener conocimiento, permitiendo al empresario, en ejercicio del Art. 20.3 del Estatuto de los Trabajadores, verificar el correcto cumplimiento de la actividad laboral de los empleados que trabajan desde su domicilio.
- Bajas fingidas: La picaresca frente a este tipo de situaciones se agrava con la pandemia. Trabajadores que presentan posibles síntomas y han tenido algún contacto con personas de riesgo, en espera de conocer resultados de PCR y que presumiblemente no realizan correctamente su deber de aislamiento y cuarentena, saliendo a la calle, o realizando actividades no permitidas. La labor del detective será presentar las pruebas pertinentes a los empresarios sobre dichos trabajadores desleales.
- Comprobar las correctas medidas COVID-19 en locales: El servicio ofertado por los detectives denominado «Mistery Shopper» o cliente misterioso, está destinado a verificar el correcto cumplimiento de las directrices y metodologías corporativas, se ha ampliado, especialmente en los centros deportivos, los comercios de alimentación y restauración, entre otros, en cuanto a la verificación del correcto desempeño e implementación de las obligadas medidas de seguridad. Con la intervención del detective se puede comprobar y corregir cualquier irregularidad que se produzca en sus delegaciones o franquiciados por falta de rigor.
Familiar
- Impago de pensiones por situación de ERTE: Con motivo de la situación de ERTE, son muchos los obligados económicos que incumplen el convenio regulador en materia de pensiones compensatoria y alimenticias, alegando que se encuentran en situación de ERTE y, consecuentemente, habiendo reducido sus ingresos. No obstante, muchos de estos trabajadores prosiguen trabajando en sus tradicionales actividades, aprovechando la situación en tanto no se agoten las prestaciones, o bien se dedican a actividades alternativas, no declaradas, que lejos de significar tal pretendida reducción de ingresos, comportan un incremento, por cuanto a la cantidad derivada de la prestación hay que añadir la de dichas actividades complementarias no declaradas.
- Descuido del progenitor en las medidas de seguridad frente a menores: Sabemos que los menores son especialmente vulnerables en cuanto a las situaciones de riesgo derivadas de posible contaminación por COVID-19. Otras situaciones en las que se encuentran los detectives, son aquellas que se producen cuando los progenitores separados desconfían de si el otro actuará con la debida diligencia cuando sus hijos menores están a su cargo o durante el régimen de visitas. Si estos son llevados a sitios de gran afluencia de personas, si son expuestos en su propia vivienda a numerosas visitas, si están llevando a cabo las medidas de higiene y prevención necesarias, etc.
- Ocupaciones ilegales frente a la pandemia: Si la ocupación de viviendas era un problema recurrente especialmente cada verano, en este año de confinamiento los casos se han multiplicado, especialmente en segundas viviendas destinadas al alquiler. El detective puede serle de ayuda recabando pruebas de la ocupación ilegal de inmuebles, a la hora de presentar una demanda para el desalojo de la misma.