Los detectives privados siguen teniendo trabajo pese a la delicada situación económica en la que nos encontramos ya que, tanto empresas como particulares, siguen contratando sus servicios para obtener información sobre distintas materias.
En España, por ejemplo, uno de los servicios más demandados a los detectives es la investigación de personas por sospecha de infidelidad en una relación. Aunque también se solicitan muchos servicios por presuntos fraudes, sobre todo por parte de empresas, que también suelen pedir investigaciones por sospechas de bajas fingidas o duplicidad de empleos.
Otra de las demandas más frecuentes es la del seguimiento -a menores muchas veces- de personas que tienen problemas con las drogas y, en muchas ocasiones, también tienen problemas de dinero.
Del mismo modo, en Italia, también se solicitan muchos servicios de seguimiento por sospecha de adulterio o por posibles adicciones. Aunque las agencias de detectives también reciben gran cantidad de solicitudes de trabajo a diario de personas, con o sin experiencia, que desean dedicarse al mundo de la investigación.
Sin embargo, en Francia, lo que más se demanda son las búsquedas de personas, ya sea de alguien que ha desaparecido, de alguien que se desea encontrar por cualquier motivo o, incluso, de alguien a quien se quiere conocer. Aunque, por supuesto, también hay un número elevado de demanda de servicios de investigación por sospecha de infidelidad.
El precio de estos servicios varía en función de cada agencia, país y tipo de demanda pero suele ser de unos 70€ la hora –tanto en España, como en Francia e Italia-, aunque puede subir en función del servicio prestado y el lugar (en días festivos y horarios nocturnos este precio aumenta un 50% aproximadamente). Si lo que se solicitan son informes pre-laborales o financieros, estos suelen rondar los 800€, mientras que los personales pueden ir desde los 1000€ hasta los 2000€.